El lunes pasado tuvimos el placer de recibir a Jorge Marirrodriga, editorialista de El País experto en el área internacional. El tema central de nuestro encuentro no podía ser más interesante y más actual: fake news.

Para comenzar, Jorge nos explicó la ironía del propio concepto de fake news o "noticias falsas": una noticia tiene que ser verdadera, si no lo es entramos en otro tipo de contenidos que buscan condicionar la opinión del público utilizando información falsa o tergiversada. Así, nos explicó cómo se manipula a la población a pensar de una determinada manera, de forma que la libertad de pensamiento individual se ve menoscabado (no podemos pensar libremente puesto que la información que se nos expone no es veraz, sino que se nos induce a creer de un forma más adecuada a los intereses de quienes lanzan las fake news).

En este sentido, las redes sociales tienen un papel muy importante y en este caso negativo, pues son un altavoz de todas las opiniones; tenemos que tener en cuenta que las opiniones desde el conocimiento son más valiosas y aprender a diferenciarlas de aquellas que provienen desde las fake news.

Llegados a este punto, hablamos sobre nuestra idea de propaganda y Jorge la confrontó con la definición de publicidad, para poder apreciar las diferencias: la propaganda busca "propagar" una ideología, en cambio, la publicidad busca "dar a conocer" un producto o servicio con una finalidad (por ejemplo: suscribirse, comprar, participar...").

Algo muy interesante que nos aportó este debate fue conocer, de manos de Jorge, los tres tipos de propaganda que existen: blanca, gris y negra. Nos centramos en la negra, ya que es peligrosa porque es la que manipula la información: el origen de la información es uno, pero se hace pasar por otro para comunicar hechos que nos creemos por la autoridad que otorgamos al origen de esa información. Hacer esto en redes sociales es muy sencillo y además, muy común. El problema es que, como receptores de esas informaciones, no sabemos qué es cierto y qué no, ¿cómo conseguirlo?  Jorge nos puso un ejemplo muy clarificador utilizando la película de "Joker": desde la libertad de cada uno, elegir actuar de forma correcta en contraposición a las actuaciones de el "Joker".

Ha sido todo un placer tener a Jorge Marirrodriga con nosotras y, esperamos que siguiendo su consejo, a partir de ahora seamos capaces de informarnos bien y contrastando las noticias para pensar libremente.