Decidirte a estudiar un máster muestra de ti una actitud activa hacia la planificación de tu carrera profesional y hacia la formación a lo largo de tu vida.
Un máster puede ser un elemento diferenciador en tu currículum vitae a la hora de optar a un puesto de trabajo. Además, es indicativo de la motivación e interés que tienes por actualizar tus conocimientos y profundizar en el sector del que te gustaría formar parte.
Motivos por los que estudiar un máster
Si ya has terminado o estás a punto de terminar la universidad y te preguntas si es realmente útil estudiar un máster hoy en día, aquí te dejamos varios motivos, ventajas, y demás aspectos sobre estudiar un máster.
Puede haber muchas razones por las que estudiar un máster, sin embargo, todo dependerá del interés particular y las expectativas que se tengan en el aspecto laboral.
A continuación te aportamos algunos motivos que te ayudarán a tomar la decisión de estudiar o no estudiar un máster:
Te hace mejor y más completo a nivel profesional
Un máster es una titulación de posgrado que otorgan ciertas universidades y escuelas de negocios. Permite mejorar a nivel laboral, tanto en la empresa en la que se trabaja como al buscar empleo, y además permite la especialización en la materia de la carrera de la que se trate.
La palabra máster se refiere a un grado académico de posgrado. Es otorgado por una universidad pública o privada o en todo caso por un centro de educación superior homologado, y la maestría oficial de posgrado se obtiene al completar el programa de estudio de 1 a 2 años.
Toda esta especialización en la materia de tu profesión, no traerá otra consecuencia que la de ser un mejor profesional, con un mayor grado de conocimiento sobre el área de estudio del máster, y que te consideres un especialista en el tema.
Aporta conocimientos que no tenías al finalizar la carrera de grado
Al finalizar los estudios superiores, decidir estudiar un máster supone una especialización en alguna materia específica de la carrera, además de pasar por una formación práctica y poder tener más y mejores oportunidades en el terreno laboral.
Estudiar un máster permite ampliar tus conocimientos y especializarte en un determinado campo. Esos conocimientos no se adquieren en una carrera de grado, donde los conocimientos son más generales a nivel profesión.
Mayor reconocimiento profesional
Estudiar un máster acredita un grado de formación de posgrado, dando reconocimiento a un nivel de formación superior, y puede que no sea reglado. Se trata de formación extra.
Esta formación extra es muy bien recibida por las empresas, en las cuales tener un especialista en un área de conocimiento como el graduado de un máster es muy importante.
Mayor relevancia que la carrera de grado
Si dudas entre estudiar una carrera nueva o estudiar un máster de algún título de grado que hayas obtenido, déjame decirte que los másteres te aportarán mayor grado de especialización, a través de sus contenidos definidos en una determinada área de conocimiento.
A grandes rasgos, estudiar un máster tiene más relevancia que estudiar solo una carrera universitaria, ya que permite cursar estudios superiores. Incluso estudiar un máster oficial puede permitirte acceder a cursar un doctorado si es el caso.
Incrementa tus contactos personales
Estudiar un máster te permite estar en contacto con personas de tu área de interés. Considerando que cada día se hace más importante crear buenas relaciones en el área de la especialidad, hacerse de una buena lista de contactos como profesores y otros compañeros puede ser muy conveniente.
Tener una red de contactos dentro de tu área de interés, incrementa las posibilidades de alcanzar un trabajo ideal, o puede ser un apoyo en el momento de tomar decisiones importantes, ya que entienden nuestros intereses y posiciones.
Abre nuevos mercados laborales
Los titulados de máster no solo tienen una nueva competencia que eleva sus resultados profesionales, también tienen mayores oportunidades de explorar y optar por ofertas laborales, ya sea en organizaciones de mayor prestigio o en otros territorios fuera del país de origen.
Un máster otorga habilidades que pueden ser de aplicación global, por lo que su ejercicio puede hacerse en casi cualquier lugar.
Mejores Ingresos
Aquellas personas que tengan la titulación en un máster, tendrán mayores responsabilidades y competencias, que por lo general se traduce en remuneraciones más elevadas. Las grandes corporaciones suelen contratar profesionales con máster para desarrollar proyectos nuevos y más grandes, ya que cuentan con conocimientos específicos que son muy bien valorados.
Estudiar un máster significa una diferencia en los resultados, por ello es posible obtener mejores empleos y por lo tanto, mayores beneficios por la aplicación de los conocimientos y habilidades que se desarrollan.
Los mejores empleos son para los mayor calificados, los que tengan mayores conocimientos. Para puestos de responsabilidad, por ejemplo, se requiere al menos un título universitario. Pero si te pones a competir con otros postulantes, incluso si ya cumples con los requisitos mínimos académicos solicitados, pero tienes otras titulaciones de cursos o masters relacionados con tu campo, aumentarás las probabilidades de que el puesto sea tuyo.
Estudiar un máster sí abre puertas de cara al mercado laboral, pero además aporta otros muchos beneficios. Se llega a señalar que aquellas personas que han realizado algún programa de posgrado, pueden aspirar hasta a un 40% más de sueldo que aquellas que no están en posesión de alguna titulación de este tipo. De hecho, la diferencia de salario en función del nivel de formación, se va acentuando con el paso de los años.
¿Máster propio o máster oficial?
Si te estás planteando estudiar un máster, debes tener claras las diferencias entre uno oficial y uno propio, ya que cada uno tiene sus propias ventajas.
Por un lado, los oficiales están regulados por las directivas del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), por lo que tienen validez en todos los países participantes. También son la puerta de acceso para aquellos que se planteen cursar un doctorado a continuación.
Por su parte, los másteres propios o "no oficiales" son ofertados por cada universidad española. No están respaldados por el Estado y suelen ser fruto de colaboraciones entre universidades y empresas. No tienen reconocimiento oficial y están muy orientados al mercado laboral. Por lo tanto, si lo que buscas es especializarte, este tipo de máster te será muy útil.
Otra diferencia entre ambos es el precio. Los títulos de másteres oficiales son más baratos que los propios, ya que estos no reciben subvenciones por parte del Estado mientras que los oficiales reciben ayudas tanto ayudas públicas como privadas (por ejemplo, las matrículas que pagan los propios estudiantes).
Otra característica que les distingue es la carga lectiva. Los másteres oficiales cuentan con una media de entre 60 y 120 créditos que aprobar mientras que los no oficiales oscilan entre los 20 y 40, lo que se traduce en menos de un año de duración.
Si aún no tienes claro qué máster estudiar puedes plantearte las siguientes preguntas:
- ¿Querrás hacer un doctorado después de cursarlo?
- ¿Estudias un máster para ampliar tus conocimientos o para especializarte de cara al mercado laboral?
- ¿Cuánto dinero estás dispuesto a gastarte?
- ¿Tienes pensado continuar los estudios fuera de España en alguno de los países pertenecientes al EEES?
En definitiva, decidir estudiar un máster puede marcar la diferencia a la hora de conseguir un empleo o el tener uno, y escalar de puesto dentro de la empresa, pero siempre supondrá una ventaja, aunque exige tener tiempo y dedicación.