Nuestro salón del Colegio Mayor ha tenido la oportunidad de acoger este lunes 28 de Noviembre a Lourdes  García Del Nero.

Empezamos la tertulia de la manera mas dinámica posible: con un juego. Este consistía en que una de las colegialas abandonaba la habitación y el resto nos aliábamos para pensar o bien que esta es un chica genial y muy simpática o pensar todo lo contrario. La colegiala, tras volver a la sala, tenía que hacer fuerza con el brazo intentando que Lourdes no consiguiera bajárselo. Cuando todas  pensábamos en lo antipática que es, su fuerza cedía y su brazo caía. Y al pensar todo lo contrario, el brazo no se dejaba vencer. Esto se debe a que los pensamientos debilitan o fortalecen nuestro músculos, según si son negativos o positivos.

Afirmaba que todo en la vida es frecuencial , todo vibra a  una determinada frecuencia y eso crea un campo de resonancias, por lo que nuestros pensamientos, emociones... influían en el resto del universo. Somos responsables de aquello que pensamos, y somos capaces a través de un pensamiento de muchas más cosas de las que imaginamos. No es posible realizar algo que no hayamos imaginado; si la idea no existe en el plano mental, no se puede realizar. Nos explicaba por lo tanto que cuando tenemos control de lo que pensamos somos más eficaces: cuando aprendemos a trabajar nuestra mente  a nuestro favor nos volvemos coherentes y ya no disipamos la energía, sino que la aprovechamos mucho más.

Nos incitaba a pensar que la única manera de disfrutar, de ser feliz, es vivir en el presente, porque nos olvidamos de vivir en el ahora, agobiándonos con situaciones pasadas o con acontecimientos del futuro que no han acontecido. Estamos siempre en el pasado y en el futuro y dejamos de habitar en el único momento en el que podemos hacerlo - que es el presente- los demás son momentos que no existen.

Nos aconsejaba que al levantarnos por las mañanas lo primero que podíamos hacer es agradecer y además nos enseñó a hacer unos ejercicios que asegura mejoraran nuestro rendimiento, concentración y nos ayudarían a estar relajadas.

Con una reflexión que nos sorprendió gratamente finalizó su tertulia: " Cada quien debe asumir que si quiere ver y encontrar amor en el mundo primero tiene que hallar la paz en un mismo, ya que la vida nos va a devolver aquello que damos". Así, aprendamos a ser paz, para que en el mundo haya paz.